Ariana Palacios
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla identificó a Francisco N. como el presunto responsable de la muerte de Ángel Huetle Lugo, un joven que falleció tras ser arrollado en la colonia Bella Vista.
El trágico incidente no solo provocó la pérdida de una vida, sino que también dio lugar a un acto altruista, ya que Huetle Lugo había decidido en vida donar sus órganos en caso de fallecimiento, lo que permitió que sus riñones fueran destinados a personas en espera de trasplantes.
El accidente ocurrió cuando el presunto responsable, a bordo de un vehículo con placas TFX135A, no respetó la luz roja del semáforo y embistió la motocicleta Italika en la que viajaba Huetle Lugo. Como resultado del impacto, el joven sufrió lesiones graves y fue trasladado al Hospital de Traumatología y Ortopedia, donde ingresó el 28 de octubre para recibir atención médica.
Pese a los esfuerzos de los médicos, Huetle Lugo no logró sobrevivir. La necropsia reveló que la causa de su muerte fue un traumatismo craneoencefálico severo. Los daños materiales del accidente se han estimado en 18 mil pesos, aunque la pérdida de una vida ha dejado un vacío mucho mayor.
Actualmente, la FGE de Puebla espera que el Juez de Control fije la fecha y hora para la audiencia inicial de formulación de imputación contra Francisco N., quien podría enfrentar cargos por su presunta responsabilidad en este fatal incidente.
El joven dejó un legado de esperanza al donar sus órganos, y se espera que su decisión inspire a otros a considerar la donación de órganos como una forma de dar vida más allá de la muerte.