Ariana Palacios
Ayer, sábado 26 de octubre, la comunidad de Los Molinos se sumió en la tristeza al confirmarse la identidad del cuerpo hallado en el río Atoyac. Se trataba de Luis Ángel Hernández Morales, un joven de 22 años que había sido reportado como desaparecido el pasado 17 de octubre.
El hallazgo se dio gracias a vecinos del Fraccionamiento Los Molinos, ubicado cerca de la prolongación de la 19 Sur, quienes, al notar el cuerpo en el río, dieron aviso inmediato al 911. Elementos de la policía municipal y paramédicos llegaron al lugar, donde confirmaron que el cadáver presentaba un avanzado estado de descomposición.
Según declaraciones de amigos cercanos, Luis Ángel desapareció después de ser sacado a la fuerza del bar «Una y Ya» por personas cuya identidad aún se desconoce. Testigos indican que el joven disfrutaba de una noche en compañía cuando fue retirado por el personal de seguridad del establecimiento, sin que hasta el momento se conozca la razón detrás de este acto.
Ante su desaparición, familiares y amigos de Luis Ángel organizaron una marcha pacífica hacia la Fiscalía del Estado para exigir respuestas y justicia. La manifestación, realizada en las inmediaciones del Parque Juárez, evidenció el creciente descontento y preocupación de la comunidad frente a los niveles de violencia e inseguridad que afectan a los jóvenes en la región.
La trágica noticia del hallazgo de Luis Ángel ha despertado la solidaridad de la comunidad y la exigencia de que las autoridades investiguen a fondo este caso, que se suma a la lista de hechos que generan incertidumbre en la sociedad.