Carolina Rodríguez
El alcalde de Cuautlancingo, Omar Alberto Muñoz Alfaro, reveló que su administración ha enfrentado grandes desafíos para garantizar el abastecimiento de agua potable en el municipio, debido a una deuda de 4 millones de pesos heredada de la gestión del panista Filomeno Sarmiento Torres.
En una entrevista con medios de comunicación, el edil detalló que este pasivo ha impedido cubrir las necesidades hídricas de la región, lo que ha derivado en una situación crítica que busca resolver antes de que finalice el año 2024. Según explicó Muñoz Alfaro, “la gente que hizo su recaudación lo hizo antes de que nosotros entráramos, y ya encontramos arcas vacías”.
El presidente municipal mencionó que las deudas pendientes incluyen multas impuestas por la Comisión Nacional de Agua (Conagua) debido a las malas prácticas de las administraciones pasadas, además de una deuda remanente con la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Otro de los problemas identificados es que la administración recibió tres permisos vencidos de la Conagua que no fueron renovados por varios años, lo que ha afectado la operación de algunos servicios esenciales, como la clausura de tres pozos.
Problemas acumulados por años
Muñoz Alfaro también subrayó que, al asumir el cargo el 15 de octubre, encontró dificultades que se han arrastrado por hasta tres décadas, lo que ha complicado aún más el trabajo de su gobierno. La crisis de seguridad, por ejemplo, es otro tema que no ha logrado solucionarse desde gestiones anteriores. El alcalde está diseñando una estrategia para proteger a las más de 41 mil familias que viven en Cuautlancingo.
En cuanto a la recolección de basura, el servicio fue abandonado tres semanas antes de que el nuevo alcalde asumiera su cargo, lo que ha generado un impacto en la calidad de vida de los habitantes. Muñoz Alfaro afirmó que se realizarán las observaciones pertinentes sobre la situación financiera y operativa que dejó la administración anterior, encabezada por Filomeno Sarmiento Torres.
Plan para salir adelante
Para enfrentar estos retos, el alcalde destacó que su administración no buscará generar más deuda pública. En cambio, apostará por estrategias de recaudación y la colaboración ciudadana para resolver la crisis financiera. “El interés es salir adelante con las aportaciones de la ciudadanía”, aseguró.
A pesar de los obstáculos, Muñoz Alfaro manifestó su compromiso de reorganizar y subsanar las irregularidades heredadas, trabajando para mejorar los servicios básicos y la seguridad en el municipio.