Ray Cardoso
Coronango. Bajo el mando de Gerardo Sánchez Aguilar, el municipio de Coronango se está cayendo a pedazos, pues en esta demarcación no solo reina la delincuencia, sino que además los habitantes tienen que lidiar con el desabasto de agua, con un deficiente servicio de recolección de basura y con la policía municipal a la que constantemente señalan de extorsionar a la ciudadanía que cansada de esta gestión comienza a dar signos de rebelión.
A 7 meses de haber tomado el cargo como alcalde de Coronango, Gerardo Sánchez Aguilar, ha demostrado no tener una idea clara de como administrar el municipio. Pues, los habitantes de esta demarcación ya no toleran la falta de gobernabilidad por parte del perredista y todo su gabinete que hasta el momento no han mostrado interés de trabajar por el bienestar de la ciudadanía.
Desde hace varios meses atrás han sido demasiadas las denuncias por parte de vecinos de las diferentes juntas auxiliares y de la propia cabecera municipal, acusando la nula preparación por parte de los elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana. Quienes dirigidos por el comisario, Víctor Tlachino Mota, solo se han enfocado en extorsionar a automovilistas que circulan por el municipio, en lugar de trabajar para resolver el tema de inseguridad que actualmente se vive en esta demarcación.
Además, actualmente se sabe que el sistema recolector de basura del municipio es insuficiente, pues desde hace unos días las principales calles del primer cuadro de la ciudad lucen repletas de basura. Lo cual, ha provocado el enojo de los vecinos que han solicitado al ayuntamiento la limpieza de las vialidades siendo ignorados por el mismo edil perredista.
Por si fuera poco, en diferentes zonas como Misiones de San Francisco, San Francisco Ocotlán, y en la cabecera municipal se ha reportado la escases de agua potable en la gran mayoría de las viviendas, situación que se dio a conocer a Sánchez Aguilar desde su llegada a la presidencia municipal, y que hasta el momento no ha podido solucionar.
De esta forma, es como la tolerancia de los habitantes de Coronango ha ido disminuyendo conforme pasan los días, pues ya se han presentado situaciones como manifestaciones y hasta la quema de patrullas como muestra de desesperación por parte de los pobladores por el nulo trabajo demostrado por el actual gobierno municipal a casi ocho meses de estar en el poder del municipio.